Mi CPU


Conchi
La memoria es para mí un mal disco duro con todo tipo de información, mi CPU, el cerebro de la bestia. Cuando ya van pasando los años mi CPU se va deteriorando. Para mí es lo más importante que tiene el ser humano, porque sin memoria no somos nadie. Mi ordenador, si no le metes información, es una máquina tonta, se puede decir así.
Con el ejemplo del Alzheimer se entiende mejor mi imagen. Esa enfermedad le va quitando información a la CPU. Los médicos deberían inventar alguna cosa, ya que la ciencia no para, para estos enfermos que pierden neuronas. Y es una pena, porque se ponen como si fueran niños pequeños, como si tuvieran que empezar a vivir de nuevo. No se acuerdan de nada y las órdenes al cerebro se paran también. Y no saben ni comer, que es algo que aprendemos antes incluso de nacer. Les tienen que enseñar otra vez a comer, a vestirse, a lavarse, a caminar. No se acuerdan dónde tienen que ir ni se acuerdan de hacer la comida ni de ir a la compra ni de apagar el gas... o no saben ni en el día en que viven ni cómo se llaman ni si es su hija o sus hermanos o su marido. No los reconocen y a veces se ponen a llorar como si fueran niños pequeños. Y terminan en centros que dicen de rehabilitación.
Yo tengo una amiga en el CAMF que se llama X, a la que operaron del cerebro y se quedó sin habla. Sin habla y sin las tantas cosas que acompañan al habla. La chica iba a estudiar la carrera de Derecho, pero en 1981 le dijeron que tenía que operarse del cerebro porque tenía un tumor. Y desde entonces la chica se ha quedado en una silla de ruedas. Entramos el mismo día aquí, fijas por fin. Para mí, X es un ejemplo de las putadas que hacen los médicos, que tocaron donde no debían y ella ha quedado parapléjica, peor que yo, y tiene mi misma edad. El fallo médico se llevó por delante su vida de abogada. Y a su padre le mató un camión, que le dio en la cabeza, así que X, que hasta hace poco vivía en su casa, como yo, se tuvo que venir a este centro, el 3 de junio, el mismo día que yo. Comprendo que los médicos son humanos, pero no se pueden hacer estas putadas, que por quitarle un tumor se quede sin habla. Para mí sería lo peor que me podría pasar. También le han salido dos filas de dientes arriba. Esto tiene mala justificación, porque a esa chica le han partido por la mitad. Y ya no se puede hacer nada para solucionarlo.
Pero sigo con lo mío, con mi CPU. La memoria se va perdiendo con los años. Se van perdiendo neuronas y se van perdiendo conexiones. La edad es como un ataque epiléptico, menos destructivo pero más persistente. Y yo algo sé de esto, que por una lesión cerebral se fue al garete mi sistema locomotor al nacer mismamente, que no fue un comienzo fácil el mío. Se cayó mi madre por las escaleras del metro y a mí me comenzó a faltar riego en el cerebro y por eso no puedo andar ni caminar, porque mi sistema nervioso no me lo permite. Para mí esto fue otra gran putada, pero pierdo la voz y es que me muero.

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