Importante

MaryMar y adredista 7
Hace mucho tiempo, cuando era una niña de unos cuatro años, me daban ataques epilépticos con frecuencia. Descubrieron un tumor en mi cabeza. Para solucionar el problema y poder seguir haciendo una vida normal, me sometieron a una operación quirúrgica. El doctor que me la hizo era un señor algo mayor. La operación fue un éxito, aunque a partir de aquel momento he tenido que utilizar gafas. Ahora las gafas son mi mejor amiga. Cuando salgo a la calle, me ayudan a ver todo lo que hay en ella, lo mismo a las personas que me sonríen cuando me saludan que a las que ni me miran. También con su ayuda hago bonitos cuadros con punto de cruz. En uno de ellos, hace unos días, he copiado la imagen de una Virgen que me regaló mi madre, poniéndole muchos colores, pues me encantan los colores. También gracias a las gafas, puedo leer fábulas, historias de amor o cuentos infantiles. Y puedo hasta hacer crucigramas y otros pasatiempos, que así me entretengo en las tardes de más soledad.

No hay comentarios: